El estrés es una sensación de tensión, tanto física como emocional, que surge ante situaciones que son percibidas por el individuo como difíciles o de difícil manejo. En realidad la palabra estrés es un anglicismo que significa tensión aunque en nuestra habla la hayamos castellanizado.
“El estrés es un conjunto de reacciones fisiológicas que prepara al organismo para la acción cuando el entorno es evaluado como amenazante y pone en peligro nuestro bienestar”
El estrés es una reacción de la persona ante estímulos que exigen dar una respuesta y generan en el organismo un estado de tensión que le prepara para la acción. Es una reacción natural.
Puede generar estrés:
- Intentar hacer varias cosas a la vez, tener la agenda repleta.
- Problemas económicos.
- Exceso (o falta) de trabajo (estrés laboral).
- Emociones violentas reiteradas, disputas familiares.
- Proponerse metas demasiado ambiciosas e imposibles de cumplir.
- Vivir por encima de nuestras posibilidades.
Tipos de estrés
Estrés saludable: el estrés puede ser algo normal y hasta saludable en la medida que ayuda a preparar al organismo para reaccionar ante los estímulos del entorno y generar respuestas de lucha o huída según sea el caso.
Estrés nocivo: sin embargo, hablaremos de estrés nocivo o no saludable cuando el cuerpo y la mente estén saturados de estímulos a los que se pretende hacer frente, sobre todo cuando se es muy autoexigente y se trazan metas demasiado ambiciosas que superen nuestras posibilidades reales de actuación.
Así, ante situaciones de estrés continuado, el organismo reaccionará generando trastornos funcionales que se traducirán en patologías tales como problemas de atención y concentración, miedos, depresión, insomnio, etc.